Somos de espíritu inquieto.

Nos atraen los desafíos, la innovación, y somos, debemos reconocerlo, un tanto obsesionados por los detalles.

Cuando algo nos apasiona, nos gusta profundizar hasta aprenderlo todo. Conocer a fondo las tradiciones antes de incorporar, con respeto y mucho cuidado, nuestra mirada personal.

Y somos, por supuesto, fanáticos del chocolate.

Hace ya algunos años, íbamos a tener una reunión en casa, en nuestro Buenos Aires natal, con un muy querido grupo de amigos y queríamos sorprenderlos. Ale puso manos a la obra en la cocina y todo lo aprendido fruto de exhaustiva investigación, viajes de descubrimientos y varios cursos con los mejores maestros chocolateros, para que el fin de esa fiesta fuera inolvidable. Fue la primera presentación de sus bombones de vanguardia. Y fue todo un éxito.

Esa noche fue el punto de partida de incesantes pedidos, de amigos, amigos de amigos, amigos de amigos de amigos, para eventos corporativos, para cumpleaños, para bodas y así, casi sin querer, por pura pasión y disfrute fuimos llevando nuestros bombones y chocolates por todos los rincones.

En esta simbiosis de conceptos, ningún lugar mejor que este para dar nacimiento a TeoAta, nuestra tienda de chocolates, un espacio donde resumir y mostrar nuestra pasión por el chocolate. Cada bombón es hecho a mano, utilizando sólo los mejores productos naturales para conseguir el equilibrio exacto de sabores y colores que lo hagan único, como piezas de arte, como una más de las joyas de Santiago.

Ahora que llegamos a este momento de nuestras vidas en el que podemos elegir hacer aquello que más nos gusta, elegimos Galicia (llenos de orgullo, nos gusta pensar que también Galicia nos eligió a nosotros) para vivir porque acá es fácil sentir como nuestra alma sonríe y, dentro de Galicia, Santiago de Compostela.

Una amiga, al enterarse de nuestra intención de mudarnos a esta tierra, nos dijo: “Vivirán en una joyería, cada rincón de Santiago es una joya cuidadosamente tallada a mano por su gente de corazón amable y generoso” Cuanta razón tenía!!!